jueves, 24 de noviembre de 2016
Misterios del fondo marino: (parte 1)
El Camino de Bimini:
Existe una estructura desconocida de bloques de piedra cerca de las Bahamas, que durante décadas han perseguido los residentes locales, científicos, místicos y psíquicos. Ellos creen que estas estructuras hechas por el hombre son los restos del antiguo continente de la Atlántida.
Nadie sabe cuál es el propósito de esta carretera y hacia dónde conduce. Está hecho de grandes losas de piedra, algunas de las cuales alcanzan 13 pies de longitud. Se encuentran a una profundidad de 20 pies, pero gracias al agua perfectamente clara son fácilmente visibles desde la superficie. La longitud total de la carretera es de una media milla.
Los investigadores más tarde declararon que estos bloques no son fragmentos usuales de rocas, sino placas especialmente tratadas. En favor del hecho de que las piedras parecen haber sido formadas por seres humanos. Algunos elementos de esta carretera bajo el agua son tan lisos como una tabla pulida.
Con el tiempo, el misterioso “camino” de piedra dio a luz a leyendas escalofriantes. Por ejemplo, dos buzos estadounidenses, que exploraron la zona en 1979, juraron que habían visto en el agua un objeto triangular brillante. El triángulo se movía rápidamente en la parte inferior, dio varios giros cerrados, y luego salió del agua, se elevó hacia el cielo y desapareció. Otro buceador vio una figura humana de diez pies de altura que se movía bajo el agua sin un traje de buceo.
Es muy difícil investigar esta área, ya que las aguas están cargadas de fuertes corrientes y un gran número de tiburones blancos. Sin embargo, una expedición estadounidense en 2004 descubrió bajo una capa de bloques de piedra un nivel más, y más abajo aún un tercer nivel. No pudieron llegar a la base de las antiguas construcciones. Los buceadores han concluido que no es un camino, sino que lo más probable es que se trate de la parte superior de unas paredes.
sábado, 19 de noviembre de 2016
Esnórquel (época moderna-siglo xx)
ÉPOCA MODERNA:
A partir de mediados del siglo XVIII comienzan a sucederse los descubrimientos e inventos que permitirían a los buceadores sumergirse a una mayor profundidad y por más tiempo. Es en este período que ganan aceptación las campanas de buzo, como la "Patache" de Jean Barrié (1640), o la de Halley (1690), que recibía suministro de aire desde la superficie.
La posterior evolución de la campana se debe a Augustus Siebe -a quien algunos nombran el "Padre del Buceo Moderno"-, que reduciría su tamaño hasta convertirla en un casco que recibía aire de una bomba desde la superficie. El mismo Siebe, en 1837, le añadiría un traje impermeable que dejaba "en seco" el cuerpo del buzo, y a la que llamó escafandra. Así nació el equipo de buzo clásico, que con algunas modificaciones ha llegado hasta nuestros dias.
En 1860, un oficial de marina francés, Auguste Denayrouze, y un ingeniero de minas, Benedict Rouquayrol, se unieron para construir un aparato mas ligero que la escafandra de buzo, que consistía en un depósito metálico que contenía aire a 30 o 40 atmósferas de presión, con un regulador elemental y una manguera que suministraba aire desde la superficie y que se podía desconectar por breves periodos de tiempo mientras el buceador seguía respirando de la reserva de su depósito. Le darían el nombre de "Aeróforo".
Este aparato no llegó a utilizarse masivamente ya que permitía escasa autonomía y no disponía de un sistema de visión adecuado. Henry Fleuss desarrolló en 1879 un equipo de buceo que funcionaba con unas mezclas de 50% a 60% de oxígeno. La primera inmersión duró una hora y tras el éxito de la misma convenció a Siebe Gorman and Co., de Londres, para que fabricara su equipo.
SIGLO XX;
En la década del 30 se crean elementos fundamentales para el desarrollo del buceo moderno como las aletas o patas de rana (1935), el tubo respirador (1938) y la máscara que abarca ojos y nariz, patentada en 1938. En 1933 un investigador francés, Le Prier, patenta la escafandra que proporciona al buceador una autonomía real, gracias a la botella con aire a alta presión (150 atmósferas), y una buena visión, con el empleo de una máscara facial. Pero este aparato no disponía de un sistema de control del consumo, lo que limitaba mucho su autonomía.
En 1943, el equipo formado por el Teniente de Navío francés Jacques-Yves Cousteau, el ingeniero Emile Gagnan, y un joven deportista Frédéric Dumas probarían en aguas de la Costa Azul un aparato que habría de convertirse en aquel con el que tantas generaciones habían soñado. Se trataba de la escafandra autónoma, cuyo elemento fundamental era un regulador que suministraba al buceador aire a presión ambiente, que se encontraba comprimido a gran presión en una botella.
Este sistema daba la oportunidad de bajar a unas superficies nunca imaginadas por el hombre y con un sistema de respiración bastante aceptable. En realidad la escafandra es solo una parte del invento, pues Cousteau utilizaba una máscara que cubría ojos y nariz, unas aletas de goma, y compensaba la flotabilidad natural del cuerpo humano con un cinturón con pastillas de plomo.
Desde ese entonces, los avances en el entendimiento de la fisiología y la técnica que permiten al hombre respirar mezclas gaseosas han permitido que los buceadores lleguen a descender hasta los 400 metros de profundidad.
jueves, 10 de noviembre de 2016
Esnórquel (prehistória-renacimiento)
PREHISTÓRIA Y ANTIGÜEDAD:
Hay indicios de la práctica del submarinismo en la prehistoria en los grandes yacimientos de conchas de moluscos (muchos de los cuales viven varios metros por debajo de la superficie del mar) que se han encontrado en el Báltico y en las costas de Portugal. Esto prueba que el hombre primitivo, salvo que esperara las grandes bajamares para juntarlos, se veía obligado a bucear hasta los lugares en que estaban enclavados. Las tribus de la Polinesia también practican el buceo desde tiempos inmemoriales. Estas tribus usaban unas primitivas pero prácticas lentes submarinas, formadas por un armazón de madera sosteniendo una lámina transparente de carey u otra caparazón de tortuga marina.
Entre los pueblo de la Antigüedad, las primeras noticias que se tienen de la práctica de la inmersión son del año 168 A.C., cuando se utilizaron buzos para recuperar el tesoro que Perseo, último rey de Macedonia (Grecia), lanzara al mar los tesoros de su palacio. En los "Problemas" de Aristóteles se mencionan dos tipos de aparatos de inmersión. Uno de ellos es la "lebeta", un antecedente de la campana de buzo, que consiste en un gran recipiente metálico que se coloca invertido en el agua, lo que permite aprisionar en su interior el volumen de aire que su capacidad admita. Uno o más buzos se acomodan en su interior, desde donde realizan salidas al fondo del mar. El otro instrumento mencionado es un tubo respirador muy parecido al actual snorkel.
EDAD MEDIA Y RENACIMIENTO:
Aunque la Edad Media vivió de espaldas al mar, es en esta época tan poco marinera donde se encuentra al extraordinario buceador Nicolás, conocido como "el pez", y cuyas proezas submarinas fueron inmortalizadas por Federico Schiller en su balada del "Buceador", y como personaje del "Quijote" de Cervantes con el nombre de "Peje Nicolao".
En el Renacimiento, el polifacético genio Leonardo da Vinci diseñó un par de aparatos de buceo. El primero consistía en un simple tubo, similar al actual snorkel. Otro diseño muestra un casco completo con antiparras y un tubo respiratorio en una especie de capuchón con púas, que hacían de defensa natural contra posibles depredadores. Una variante representa un voluminoso recipiente de aire sobre el pecho del buzo conectado a una máscara que le cubre parte del rostro. El más perfecto de sus diseños consiste en un traje completo de buzo, clasificado por otros autores como "equipo que cubre todas las necesidades vitales y las exigencias especiales que un hombre puede necesitar bajo el agua".
Entre los pueblo de la Antigüedad, las primeras noticias que se tienen de la práctica de la inmersión son del año 168 A.C., cuando se utilizaron buzos para recuperar el tesoro que Perseo, último rey de Macedonia (Grecia), lanzara al mar los tesoros de su palacio. En los "Problemas" de Aristóteles se mencionan dos tipos de aparatos de inmersión. Uno de ellos es la "lebeta", un antecedente de la campana de buzo, que consiste en un gran recipiente metálico que se coloca invertido en el agua, lo que permite aprisionar en su interior el volumen de aire que su capacidad admita. Uno o más buzos se acomodan en su interior, desde donde realizan salidas al fondo del mar. El otro instrumento mencionado es un tubo respirador muy parecido al actual snorkel.
EDAD MEDIA Y RENACIMIENTO:
Aunque la Edad Media vivió de espaldas al mar, es en esta época tan poco marinera donde se encuentra al extraordinario buceador Nicolás, conocido como "el pez", y cuyas proezas submarinas fueron inmortalizadas por Federico Schiller en su balada del "Buceador", y como personaje del "Quijote" de Cervantes con el nombre de "Peje Nicolao".
En el Renacimiento, el polifacético genio Leonardo da Vinci diseñó un par de aparatos de buceo. El primero consistía en un simple tubo, similar al actual snorkel. Otro diseño muestra un casco completo con antiparras y un tubo respiratorio en una especie de capuchón con púas, que hacían de defensa natural contra posibles depredadores. Una variante representa un voluminoso recipiente de aire sobre el pecho del buzo conectado a una máscara que le cubre parte del rostro. El más perfecto de sus diseños consiste en un traje completo de buzo, clasificado por otros autores como "equipo que cubre todas las necesidades vitales y las exigencias especiales que un hombre puede necesitar bajo el agua".
martes, 1 de noviembre de 2016
¿Los tiburones atacan personas?
Esta semana os hablaré sobre un tema al que todo el mundo teme enfrentarse: el ataque de un tiburón. Mucha gente piensa que los tiburones son animales que comen cualquier cosa que se encuentren, pero no es así, si atacan es por que el hombre invade su medio, en segundo los tiburones tienden a morder cualquier objeto para saber que es, ya que su sentido táctil esta en la boca, tercero el tiburón no come humanos porque quiera, simplemente están completamente fuera de su cadena alimenticia, siempre es por confundirlos con alguna de sus presas habituales o por miedo.
¿Que debemos hacer si nos encontramos un tiburón?
1. Mantén la calma. Aunque quieras salir rápido del agua si ataca un tiburón, él será más rápido que tú, y nadar rápido no será la mejor opción. Es importante que uses el ingenio y averigües cómo estar seguro
2.Vigila al tiburón en todo momento. Puede que se aleje durante un momento para luego volver a atacarte. No dejes que esto ocurra. Para poder defenderte, tienes que saber donde está, así que obsérvalo incluso si estás intentando escapar
3.Ponte en posición defensiva. Si no puedes salir inmediatamente del agua, reduce los posibles ángulos de ataque del tiburón. Apóyate contra cualquier pared o coral que haya cerca. Si estás cerca de la costa, quizá quieras apoyarte en el fondo. Si te encuentras en mar abierto con otro nadador, apóyense uno contra la espalda del otro. Si estás solo y estás buceando, intenta hacer burbujas por fuera de tu máscara; a los tiburones no les gustan las burbujas y puede que así te dejen tranquilo.
4.Lucha. Hacerte el muerto no disuadirá a un tiburón agresivo. La mejor opción es hacerse pasar por una presa difícil y fuerte. Normalmente un golpe fuerte en las agallas, ojos y morro le hará retirarse, ya que son las únicas áreas vulnerables de un tiburón. Si continúa atacándote, agárrate de los ojos o de las agallas.
Si tienes un arma o una lanza, ¡úsala! Apunta a la cabeza, especialmente los ojos o las agallas.
Si no tienes un arma, improvisa. Usa cualquier cosa, como una cámara o una roca para defenderte.
Si no tienes nada a mano, utiliza tu propio cuerpo. Golpea con puños, codos, rodillas y pies.
Sal del agua. A pesar de que hay muchas cosas que puedes hacer para evitar un ataque, no estarás completamente seguro hasta que no salgas del agua.
5.Si hay un barco cerca, llama calmadamente para que te recojan. Quédate todo lo quieto que puedas mientras esperas (siempre y cuando el tiburón no te esté atacando) y métete en el barco tan rápido como puedas.
6.Si estás cerca de la costa, nada rápido pero suavemente, o de lo contrario llamarás la atención del tiburón. Los movimientos erráticos también dan la sensación de que estás herido, y resultarás una presa más atractiva para el tiburón. Nada de espaldas, lo cual reducirá las salpicaduras.
Nota :Los ataques se deben a la curiosidad, cuando un tiburón encuentra algo nuevo por lo general le da un mordisco para saber si es algo comestible
¿Que debemos hacer si nos encontramos un tiburón?
1. Mantén la calma. Aunque quieras salir rápido del agua si ataca un tiburón, él será más rápido que tú, y nadar rápido no será la mejor opción. Es importante que uses el ingenio y averigües cómo estar seguro
2.Vigila al tiburón en todo momento. Puede que se aleje durante un momento para luego volver a atacarte. No dejes que esto ocurra. Para poder defenderte, tienes que saber donde está, así que obsérvalo incluso si estás intentando escapar
3.Ponte en posición defensiva. Si no puedes salir inmediatamente del agua, reduce los posibles ángulos de ataque del tiburón. Apóyate contra cualquier pared o coral que haya cerca. Si estás cerca de la costa, quizá quieras apoyarte en el fondo. Si te encuentras en mar abierto con otro nadador, apóyense uno contra la espalda del otro. Si estás solo y estás buceando, intenta hacer burbujas por fuera de tu máscara; a los tiburones no les gustan las burbujas y puede que así te dejen tranquilo.
4.Lucha. Hacerte el muerto no disuadirá a un tiburón agresivo. La mejor opción es hacerse pasar por una presa difícil y fuerte. Normalmente un golpe fuerte en las agallas, ojos y morro le hará retirarse, ya que son las únicas áreas vulnerables de un tiburón. Si continúa atacándote, agárrate de los ojos o de las agallas.
Si tienes un arma o una lanza, ¡úsala! Apunta a la cabeza, especialmente los ojos o las agallas.
Si no tienes un arma, improvisa. Usa cualquier cosa, como una cámara o una roca para defenderte.
Si no tienes nada a mano, utiliza tu propio cuerpo. Golpea con puños, codos, rodillas y pies.
Sal del agua. A pesar de que hay muchas cosas que puedes hacer para evitar un ataque, no estarás completamente seguro hasta que no salgas del agua.
5.Si hay un barco cerca, llama calmadamente para que te recojan. Quédate todo lo quieto que puedas mientras esperas (siempre y cuando el tiburón no te esté atacando) y métete en el barco tan rápido como puedas.
6.Si estás cerca de la costa, nada rápido pero suavemente, o de lo contrario llamarás la atención del tiburón. Los movimientos erráticos también dan la sensación de que estás herido, y resultarás una presa más atractiva para el tiburón. Nada de espaldas, lo cual reducirá las salpicaduras.
Nota :Los ataques se deben a la curiosidad, cuando un tiburón encuentra algo nuevo por lo general le da un mordisco para saber si es algo comestible
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